La psicología es la ciencia que trata del estudio y análisis de la conducta, pensamientos y emociones del ser humano. Sus objetivos son comprender los procesos mentales del individuo o sistema para en el caso del área clínica, relacionarlo con los síntomas u objetivo a tratar del paciente y poder así solucionarlo.

Entendemos la psicoterapia como la profundización en el entendimiento propio y el acceso a los procesos inconscientes de la mente, siendo esta la herramienta fundamental para el cambio cognitivo. La psicoterapia trabaja con la palabra y a través de determinadas herramientas se ayuda al paciente a descifrar con qué está conectado su malestar, sufrimiento o aquello que quiere cambiar.

Las primeras sesiones son siempre de evaluación tras las cuales se ofrece una visión del problema que trae al paciente a consulta, las áreas de su vida con las que está conectado y los objetivos a trabajar. La asistencia y el compromiso en la psicoterapia son fundamentales para poder hacer un proceso de una forma científica y exitosa, siendo la frecuencia adecuada de trabajo semanal. Hay que entender que los procesos psicoterapéuticos son lentos y sacrificados aunque esto depende del motivo de consulta y del diagnóstico, necesitándose para la evolución favorable una actitud activa, de responsabilidad, cambio y de búsqueda de soluciones.